Llamado también el Valle Morisco por ser el último reducto de los árabes en España, el río Segura lo convierte en un vergel casi desconocido, creando en su vega un paisaje fértil de frutales y palmeras. La visita al valle debe comenzarse en el Centro de Interpretación situado en Archena, un buen punto de partida para conocer la comarca y disfrutar de un turismo rural, activo y de salud.